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martes, 30 de octubre de 2012

NBA : It's Showtime


Las luces se encienden nuevamente en el planeta NBA, una campaña que, en principio, parte con dos candidatos marcados y otro que les pisan los talones. Se corre el telón, es hora del mayor espectáculo de básquet del planeta.



El Heat, campeón, sólo piensa en repetir el anillo y será el rival a vencer. No sólo porque mantuvo al plantel que logró el título, incluidos James, Wade y Bosh, sino porque sumó profundidad con dos veteranos de calidad como Ray Allen y Rashard Lewis. Su principal arma es LeBron, el último MVP, el Rey que por fin logró su tan deseada corona y el hombre con un objetivo: “Quiero ser el mejor de todos los tiempos, así de simple”, señaló. A los casi 28 años, LBJ está en su pico de rendimiento y puede seguir creciendo, pero tiene muchísimo por hacer. Y el primero que tratará de impedirlo será el mejor de la última década: Bryant.

El astro de LA (34) no estará solo en la búsqueda de su sexto anillDEPOR Tras perder en semi del Oeste, los Lakers se reforzaron como nadie: sumaron a Dwight Howard, el pivote más dominante, y a Nash, talento y sabiduría desde la base, para formar junto con Kobe, Metta World Peace y Gasol un quinteto que mete miedo. Tal vez le falte recambio (Jamison, Meeks, Jordan Hill y Blake parecen poco), pero si se mantienen sanos pueden ganarle a cualquiera. Ojo: cuando Miami formó su Big 3 le costó conseguir buen funcionamiento en su 1ª campaña. Cinco buenos nombres no siempre son garantía de buen equipo.

Oklahoma será la otra punta del triángulo. El Thunder está a la altura de los otros y peleará el Oeste con los Lakers, pero la salida de James Harden, un pilar, por Kevin Martin puede debilitarlo. De todas maneras, el núcleo finalista se mantiene: Durant (goleador de las últimas tres temporadas), Russell, Westbrook, Ibaka y compañía quieren la revancha para un equipo con juventud y talento de sobra. No hay que olvidarse del lote que vendrá atrás, con Boston, Chicago e Indiana en el Este, y los Spurs de Ginóbili, Clippers y Dallas en el Oeste. Pero la mesa está servida y hay tres que pican para quedarse con todo. A disfrutar del mejor plato que puede ofrecer la pelota naranja.

Olé

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