Con una superlativa producción del astro LeBron James, Miami Heat se metió este sábado en la final de la NBA al superar por 101 a 88 a Boston Celtics y adjudicarse así la Conferencia Este por un ajustado 4-3.
El alero James, al igual que lo ocurrido en el sexto encuentro en el TD Garden de Boston, fue determinante para la victoria del conjunto de Erik Spoelstra. Dos noches antes, LeBron había anotado 45 tantos para garantizar el triunfo de los Heat. En el último juego, el ex Cleveland Cavaliers no salió prácticamente en ningún momento del campo (jugó 47 minutos 32 segundos) y acumuló 31 tantos (8 de 15 en dobles, 1 de 5 en triples, 12 de 17 en libres). La planilla de LeBron se completó con 12 rebotes, 2 asistencias, un robo y una tapa. En el aspecto deficitario apenas hay que consignar tres pérdidas de balón.
También fue muy útil a la victoria de los Heat la contribución del reserva Chris Bosh, quien sumó 19 puntos (5 de 6 en dobles, 3 de 4 en triples) y 8 rebotes, en los más de 30 minutos que permaneció en el rectángulo de juego. Además, el base Dwyane Wade anotó 23 tantos (8 de 17 en tiros de cancha), bajó 6 rebotes y repartió otras 6 asistencias.
En los Celtics, que se desinflaron en el cuarto y último cuarto, se lució el armador Rajon Rondo, quien, por segunda vez en su carrera, se hizo acreedor de un triple-doble en un séptimo partido de play off de conferencia. El zurdo número 9 del equipo orientado por Glenn Rivers logró 22 puntos (9 de 20 en dobles, 1 de 2 en triples, 1 de 2 en libres), 14 asistencias y 10 rebotes. Además, Paul Pierce encestó 19 canastas, mientras que Brandon Bass aportó 16 unidades.
Los Heat jugarán de esta manera, con desventaja de localía, la final de la NBA –por segunda temporada al hilo- desde el próximo martes ante Oklahoma City Thunder, que se quedó con la Conferencia Oeste, al doblegar en la serie final a San Antonio Spurs de Emanuel Ginóbili, por 4-2.
Olé
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