“Necesitábamos ganar para levantar la confianza”, fue la frase lanzada por el estratega Javier Martínez, que pinta de cuerpo y alma la realidad de Regatas Corrientes, sumido en un río de lesiones y necesidades, con la Liga de las Américas a la vuelta de la esquina. “Estamos de Guatemala a guatepeor, ya que Pedro (por Calderón) se lesionó el dedo”, señaló.
Regatas Corrientes venía muy golpeado, no sólo por la seguidilla de partidos perdidos (tres en carácter de visitante) sino también por la enfermería que hay en el plantel, y el viernes, ante Sionistas de Paraná, tenía un gran desafío de local, por lo que todo era incógnita e incertidumbre, más teniendo en cuenta que las ausencias, llámese Paolo Quinteros y Louis Roe, seguían.
Pero el equipo sacó fuerzas de flaquezas, y con mucho temperamento, solides defensiva y de la mano del estratega paraguayo Javier Martínez, autor de 23 puntos y clave en los momentos calientes del juego, llevó a buen puerto un partido crucial, en suplementario, por 77 a 72 para darle una inyección de optimismo a un plantel muy golpeado.
CONFIANZA Y ALGO MAS
“Fue un triunfo muy importante porque necesitábamos ganar para levantar la confianza, una confianza que habíamos perdido principalmente de visitante. No es fácil jugar con tres y hasta cuatro jugadores menos, y con jugadores nuevos que se van ensamblando. Y la Liga esta muy fuerte”, dijo entre sus primeros conceptos el paraguayo Javier Martínez.
“Nosotros hoy no podemos pensar en lo malo que hicimos en estos partidos de visitante. Yo creo que ya dimos un paso importante frente Obras, aunque es difícil ver cosas positivas en la derrota, más bien ves todo negro, cuando no es así; por eso el triunfo ante Sionista es importante para levantar el animo y encarar el clásico, el viaje a Venezuela y el final de la fase regular con otra mentalidad”, añadió.
LA ROTACIÓN
El entrenador Nicolás Casalánguida dosificó muy bien el juego de Martínez, el punto que el base, incluido el suplementario, jugó sólo 28 minutos, cerrando de manera acertada el juego, a lo que el estratega comentó que “la idea, con el cuerpo técnico, era jugar 20 minutos, pero el tramite del partido y el suplementario me llevaron a jugar 27 minutos”.
“Estuvimos más o menos en lo habíamos conversado, que son los minutos que yo puedo dar de calidad, después, sobre todo cuando son arriba de treinta, llegó sin aire al final, que es en donde se toman las decisiones más importantes, y si no tenés aire es difícil pensar”, siguió comentando el base respecto a la rotación del plantel, hoy muy corto.
OTRO LESIONADO
“La verdad que estamos de Guatemala a guatepeor, ya que Pedro (por Calderón) se lesionó el dedo”, dijo Martínez adelantando la lesión del pivote Pedro Calderón que se fracturó uno de sus dedos de la mano izquierda, aunque, con un vendaje especial, jugaría ante San Martín.
Recordemos que Regatas viene realizó toda la gira por Río Tercero, Capital Federal y Mar del Plata sin Paolo Quinteros y “Lou” Roe y esto, indudablemente debilitó el equipo y lo acorto; inclusivo en Mar del Plata no fue de la partida Diego Cavaco con molestías en uno de sus gemelos.
“Estamos tratamos de ponerle el pecho a las balas los que estamos, no podemos ponernos a llorar por lo que no están, ya que cuando estén seguramente lo vamos a aprovechar. Le tengo mucha fe al equipo, creo que vamos a llegar completo y en el mejor momento en la parte más importante del torneo”, comentó respecto a la enfermería que tiene Regatas el gran estratega.
EL CLASICO
Para finalizar y metidos en el clásico del domingo ante San Martín, Martínez señaló que “esperamos que la gente nos acompañe. Pese a todo lo que nos está pasando estamos tratando de ir mejorando día a día, y pensando que San Martín viene como número uno de la Liga, pese a su situación, porque tiene personal para ello. Así que nosotros vamos a salir con mucho respecto a jugarle. Esperamos que sea una gran fiesta”.
Prensa Regatas
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