Los de Scariolo pusieron en apuros a su rival en el primer cuarto, pero reaccionó Melo para comandar la levantada que terminó en triunfo por 100-78. Los dos regularon el ritmo guardando y ocultando algo para los Juegos Olimpicos.
España salió como un ciclón ante Estados Unidos, con un juego rápido y con Calderón de director. Los europeos conseguían una ventaja cómoda sin tener que esforzarse demasiado (10-3 luego de un triple de Navarro).
Aunque era un amistoso, el alto carácter competitivo y el ambientazo del Sant Jordi consiguieron que los equipos jugasen a un ritmo más alto de lo esperado pero lejos del propio de unos Juegos Olímpicos.
Carmelo Anthony se encargó de mantener a flote a los americanos mientras Ibaka sacaba los colores a los interiores de Coach K. El pívot de Oklahoma consiguió tres volcadas seguidas con Calderón de socio (seis asistencias en el primer cuarto) y puso el 20-13. Los árbitros cumplían y señalaban los pasos con mayor frecuencia de lo esperado y Scariolo se encargó de demostrar el carácter amistoso dando juego a los diez disponibles en los primeros diez minutos de partido (Marc y Sergio no jugaron por precaución).
Pese a que Pau Gasol le sacó en el segundo cuarto la tercera falta a Chandler, Estados Unidos demostró su versatilidad con los "falsos pívots". Los hombres altos españoles sufrieron mucho para frenar a los aleros interiores de Estados Unidos, especialmente a Carmelo Anthony. El de los Knicks se encontró muy cómodo tirando desde el perímetro (23 puntos y 5/6 en tiros tres al descanso). Gracias a Melo y a una gran defensa el Dream Team tomó ventaja en el marcador. España no se encontraba tan cómoda como antes y le costaba mucho encontrar espacios en ataque.
Una dunkeada de Kobe Bryant tras hacer un rectificado que sólo él y tres jugadores más pueden hacer en el mundo reflejaba la calidad de los americanos al filo del final del segundo cuarto. Rudy Fernández y Reyes acortaban distancias sobre el final tras ir perdiendo por trece (40-48).
Tras el descanso Durant salió al Sant Jordi con la intención de reclamar su porción de protagonismo. Los de Krzyzewski se aprovecharon de las facilidades dadas por una defensa más ligera y LeBron se lució con una volcada estratosférica (44-55). Los de Scariolo concedieron tiros fáciles y Durant no perdonó (60-46). El espectáculo comenzó por parte de los americanos y España se dedicó a no perder por demasiados puntos.
Los fallos en los tiros libres y las pérdidas de balón manifestaban la poca intensidad de la españoles. Reyes y Pau se centraban en mantener al local con una desventaja menor a los veinte puntos y encarar el último cuarto con un marcador "asumible" dada la tipología del encuentro (60-74). Una jugada con cuatro rebotes ofensivos seguidos para los americanos reflejaba el nivel de relajación de España en el último tramo del partido.
Sólo Pau Gasol intentó mantener la intensidad en España. El jugador de los Lakers fue el mejor de los anfitriones con 19 puntos, pero con Ibaka desaparecido en la segunda parte y sin su hermano Marc, se encontró muy solo en la zona.
Dos triples de LeBron James dieron la puntilla a España, que se mostró combativa en algunos momentos del encuentro pero se dejó ir tras el descanso, demasiada relajación hasta para un amistoso... si delante está el mejor equipo del mundo.
España se dejó ir, o porque vio la victoria imposible o porque prefiere dejar lo mejor para Londres, sólo Scariolo lo sabe. Un buen primer cuarto, pese a la enorme baja de Marc Gasol en la zona, y la ausencia del Chacho, es la mejor sensación que deja un amistoso que sabe a final anticipada.
Aunque era un amistoso, el alto carácter competitivo y el ambientazo del Sant Jordi consiguieron que los equipos jugasen a un ritmo más alto de lo esperado pero lejos del propio de unos Juegos Olímpicos.
Carmelo Anthony se encargó de mantener a flote a los americanos mientras Ibaka sacaba los colores a los interiores de Coach K. El pívot de Oklahoma consiguió tres volcadas seguidas con Calderón de socio (seis asistencias en el primer cuarto) y puso el 20-13. Los árbitros cumplían y señalaban los pasos con mayor frecuencia de lo esperado y Scariolo se encargó de demostrar el carácter amistoso dando juego a los diez disponibles en los primeros diez minutos de partido (Marc y Sergio no jugaron por precaución).
Pese a que Pau Gasol le sacó en el segundo cuarto la tercera falta a Chandler, Estados Unidos demostró su versatilidad con los "falsos pívots". Los hombres altos españoles sufrieron mucho para frenar a los aleros interiores de Estados Unidos, especialmente a Carmelo Anthony. El de los Knicks se encontró muy cómodo tirando desde el perímetro (23 puntos y 5/6 en tiros tres al descanso). Gracias a Melo y a una gran defensa el Dream Team tomó ventaja en el marcador. España no se encontraba tan cómoda como antes y le costaba mucho encontrar espacios en ataque.
Una dunkeada de Kobe Bryant tras hacer un rectificado que sólo él y tres jugadores más pueden hacer en el mundo reflejaba la calidad de los americanos al filo del final del segundo cuarto. Rudy Fernández y Reyes acortaban distancias sobre el final tras ir perdiendo por trece (40-48).
Tras el descanso Durant salió al Sant Jordi con la intención de reclamar su porción de protagonismo. Los de Krzyzewski se aprovecharon de las facilidades dadas por una defensa más ligera y LeBron se lució con una volcada estratosférica (44-55). Los de Scariolo concedieron tiros fáciles y Durant no perdonó (60-46). El espectáculo comenzó por parte de los americanos y España se dedicó a no perder por demasiados puntos.
Los fallos en los tiros libres y las pérdidas de balón manifestaban la poca intensidad de la españoles. Reyes y Pau se centraban en mantener al local con una desventaja menor a los veinte puntos y encarar el último cuarto con un marcador "asumible" dada la tipología del encuentro (60-74). Una jugada con cuatro rebotes ofensivos seguidos para los americanos reflejaba el nivel de relajación de España en el último tramo del partido.
Sólo Pau Gasol intentó mantener la intensidad en España. El jugador de los Lakers fue el mejor de los anfitriones con 19 puntos, pero con Ibaka desaparecido en la segunda parte y sin su hermano Marc, se encontró muy solo en la zona.
Dos triples de LeBron James dieron la puntilla a España, que se mostró combativa en algunos momentos del encuentro pero se dejó ir tras el descanso, demasiada relajación hasta para un amistoso... si delante está el mejor equipo del mundo.
España se dejó ir, o porque vio la victoria imposible o porque prefiere dejar lo mejor para Londres, sólo Scariolo lo sabe. Un buen primer cuarto, pese a la enorme baja de Marc Gasol en la zona, y la ausencia del Chacho, es la mejor sensación que deja un amistoso que sabe a final anticipada.
Diario Marca
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